Estamos a un año de la convocatoria a las próximas elecciones para designar presidente, vicepresidente y asambleístas que regirán el periodo 2017-2021 en nuestro país. Para unos queda poco tiempo para hacer proselitismo político, los menos expertos creen que falta mucho para comenzar a influir en los ciudadanos.
Sin embargo, en la tienda verde local, producto de la tecnología informática, se observa y se lee “dimes y diretes” en las redes sociales entre militantes del partido.
Es común el deseo de sus miembros de ser partícipes del quehacer gubernamental en la provincia de Santa Elena, sin embargo, ese propósito no podrán cumplirlo muchos, como dice el pueblo "No hay cama para tanta gente".
Todo empieza a raíz de la última elección de directores provinciales, cantonales y más en la tienda verde, los que creyeron que tenían las elecciones internas a su favor, no ganaron, la responsabilidad recayó en otros.
A partir de ese evento, comenzaron las disputas internas que salieron a la opinión pública, los que habían ganado las elecciones pensaron que podían influir sobre directivos de mayor nivel para inmiscuirse en la administración de la provincia. Lo cual no ha sucedido.
Los que perdieron han logrado a través de su mayor experiencia influir sobre los directivos que toman las decisiones en el país, pensando que los designados demostrarían que pueden cambiar a través de su capacidad e inteligencia la realidad de esta provincia.
De la capacidad de ellos depende el futuro electoral del partido verde en la provincia de Santa Elena, aunque su máximo líder tenga aún la preferencia electoral, no sabemos si la ciudadanía elegirá a los que hoy se disputan el liderazgo, en caso que sean tomados en cuenta para las próximas elecciones del 2017.
Estas diferencias de opiniones ¿Afectará el resultado electoral en la provincia?, o tendrá el movimiento verde que tomar personajes con capacidad de liderazgo de fuera del partido para afrontar las nuevas elecciones?
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