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| Semana Santa en Santa Elena |
Siete iglesias y dos santuarios constan en el mapa religioso que la Dirección Provincial de Turismo de Santa Elena presenta como las principales opciones para visitar durante la Semana Santa.
Los templos son: Virgen de la Merced, de Salinas; San Rafael de Arcángel, en José Luis Tamayo; Nuestra Señora de la Esperanza, en La Libertad; la catedral Emperatriz, en Santa Elena; Virgen de las Nubes, de Ballenita; Santa Catalina, de Colonche; San José, en Ancón; y los santuarios Virgen de Fátima, en Palmar, y Blanca Estrella de la Mar, de Olón.
En estos lugares, desde este Domingo de Ramos hasta el Día de Pascua se celebrará la eucaristía, para que los visitantes busquen un acercamiento con Dios. El pueblo católico peninsular se alista para el Martes Santo, consagrado al Baño de la Cruz, en Ballenita; y el Viernes Santo, día de la crucifixión.
Una tradición. Al pie de una pequeña cuesta con vista al mar, en Ballenita, Cruz Nicomede, pescador de 54 años, recuerda la primera vez que le tocó "bañar la cruz", tradición de fe que se realiza en este lugar cada Martes Santo.
"Cumplía seis años cuando mi padre, José Yagual, me pidió que lo acompañe a bañar la cruz; en ese entonces yo salía con él a pescar en un pequeño bote. Desde allí soy parte del grupo que con mucha devoción la llevamos al mar", comenta.
Al igual que otros pescadores de la zona, Yagual desconoce cuándo se inició el rito, que lleva más de medio siglo.
Pero los artesanos sí saben el motivo del acto. "Fueron nuestros abuelos, en agradecimiento a Dios por la pesca y la protección en el mar. Es que de los tantos años que llevo pescando, solo de Ballenita no se quedan pescadores perdidos o muertos en el agua", sostiene el habitante José Solano.
Luego de llevar la cruz al mar, los pescadores la hunden en tres oportunidades. Según señalan, en cada una de ellas piden por la abundante pesca, el amparo en sus lanchas y el perdón por las faltas cometidas. Después el crucifijo lo levantan entre las olas, en agradecimiento al pacto.
Para los pescadores de Ballenita y de toda la Península, esta ceremonia religiosa es el más grande acto de fe que efectúan en la Semana Santa, pues ese día no salen a sus faenas.
"Por eso Dios nos bendice y siempre tenemos pesca, incluso entre las piedras capturamos ostras y pulpos", remarca el artesano Pedro Del Pezo.
Son centenares de feligreses que cada año acuden al Baño de la Cruz, acontecimiento que también comprende una peregrinación de cuatro kilómetros que se inicia desde la catedral de Santa Elena hasta llegar al mar. Durante el recorrido se reza el viacrucis y se entonan cánticos religiosos.
Mientras, los habitantes de las 42 poblaciones de la parroquia Colonche cumplen con una penitencia singular en Viernes Santo. Ellos suben una de las montañas más altas que tiene la cordillera Chongón-Colonche. El cerro de Íceras, cuya altura es de aproximadamente 300 metros, es la elevación más inclinada del sector.
En la cima se encuentra una cruz de 8 metros de alto donde finaliza el rezo de las 14 estaciones del viacrucis. El periplo se inicia desde las primeras horas de la mañana con una representación de la muerte de Jesús. El escenario, que se asemeja al monte de los Olivos, está ubicado en la localidad de Limoncito, perteneciente a la comuna Cerezal-Bellavista.
Subir el cerro es uno de los sacrificios que los fieles realizan para pedir al Todopoderoso que perdone sus culpas. Unos lo hacen de rodillas y otros llevan pequeñas cruces de madera. Durante el empinado camino van entonando cánticos religiosos.
Otro de los atractivos de la Península es el santuario Blanca Estrella de la Mar, situado en Olón, a 195 kilómetros de Guayaquil. Los feligreses visitan la cripta de la Virgen Rosa Mística, que aparentemente lloró sangre en 1990.
La actividad en el templo religioso en los días santos comprende el rezo del viacrucis y la celebración de la misa.
La mayoría de los templos mantiene la madera como materia prima en su construcción. La restauración ha sido fundamental.
Cuatro kilómetros aproximadamente comprende la ruta de la procesión desde la catedral de Santa Elena hasta llegar al océano.
Joffre Lino - Expreso
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