María de Lourdes Arboleda, secretaria de Transparencia, anuncia:
VAMOS CONTRA LA IMPUNIDAD EN CASOS DE RELEVANCIA ECONÓMICA, SOCIAL Y AMBIENTAL
Enormes inversiones con fondos públicos y perjuicios para el país, atentados contra el ambiente y afectaciones sociales son, entre otros, los criterios para la selección de casos prioritarios, en los que el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social Transitorio (CPCCS-T) iniciará una serie de acciones contra la impunidad.
Así lo explica, en esta entrevista, María de Lourdes Arboleda, secretaria de Transparencia y Lucha contra la Corrupción del CPCCS-T.
¿Cuáles fueron los criterios para seleccionar como prioritarios los casos anunciados por el Pleno del CPCCS-T?
Hay algunos casos que fueron escogidos por su relevancia económica, social y ambiental. Existe una clara relevancia económica, por ejemplo, en la Refinería de Esmeraldas, donde el proceso de repotenciación pasó de aproximadamente de 200 millones a 2.200 millones, con una serie de irregularidades que han sido denunciadas. Lo que resulta un atentado contra un país como el nuestro, necesitado de recursos para su desarrollo.
Un tema de relevancia económico-social es el tema de la reconstrucción de Manabí, por el terremoto. Allí se recogieron dineros de la gente, de la cooperación internacional, del Estado; y existen indicios de presunto mal uso de los recursos que se destinan a obras que la gente no necesita o que no son prioritarias, dejando de lado las necesidades reales y demandas de la gente. Cuando vinieron los integrantes de la Comisión Nacional Anticorrupción de Manabí a entregar sus denuncias al Pleno del CPCCS-T dijeron, por ejemplo, que se están construyendo canchas de fútbol mientras todavía hay gente que no tiene casa.
En el caso de la Refinería del Pacífico, estamos hablando no solamente de una inversión de 1.500 millones que no tiene un resultado efectivo, sino que representa un proyecto con gran impacto social negativo; hay comunas que fueron expropiadas, a las que aún no se les paga y a quienes no se les socializó adecuadamente el proyecto, obteniendo un “visto bueno” que ahora algunos de ellos rechazan al sentir que fueron manipulados. Pero lo más grave realmente es que hablamos de un verdadero pecado ambiental, porque para poner allí la Refinería, el Gobierno anterior redujo el área protegida y luego mataron el bosque, las especies. En una provincia como Manabí que no tiene agua, el canchón de la Refinería fue la mayor contribución para incrementar el proceso de desertificación de esa zona, donde están importantes fuentes de agua y el bosque nublado.
¿Cuál será el papel del CPCCS-T si en la mayoría de estos casos ya existen denuncias que se han hecho públicas, e incluso investigaciones avanzadas o ya judicializadas?
Justamente, antes encontramos que un mecanismo de impunidad fue dejar los casos quietos, no moverlos, hacerse de la vista ciega, y se quedaban allí durmiendo. Por eso, más que una investigación tradicional, vamos a investigar en qué situación se encuentran los casos para adoptar acciones contra la impunidad. Esto implica primero identificar en qué etapa se encuentra cada proceso, completarlo si es necesario, o ubicar en dónde y porqué se quedó paralizado, y empezar a mover aquellos que descansan tras el velo de la impunidad, en busca de resultados. Porque eso es lo que demanda ciudadanía.
En varios de los casos priorizados tenemos avances en el sentido señalado, en otros estamos constituyendo los equipos de trabajo. Además, hacemos un esfuerzo enorme por procesar las denuncias recibidas, tanto las recientes como las de períodos anteriores, tenemos muchísima información que analizar, valorar y procesar.
Con todo, la idea que queremos dejar clara es que en este corto tiempo que tenemos, no alcanzaremos a resolver todos los temas de corrupción, ni a investigar todos los casos para que se muevan. Nuestro objetivo es mostrar que se puede trabajar de manera diferente, desde la ética y desde la eficiencia en el ámbito público. Queremos hablar con actos que permitan que las ciudadanas y los ciudadanos vean que es posible recuperar la confianza en una institucionalidad del Estado, si esta es proba.
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Así lo explica, en esta entrevista, María de Lourdes Arboleda, secretaria de Transparencia y Lucha contra la Corrupción del CPCCS-T.
¿Cuáles fueron los criterios para seleccionar como prioritarios los casos anunciados por el Pleno del CPCCS-T?
Hay algunos casos que fueron escogidos por su relevancia económica, social y ambiental. Existe una clara relevancia económica, por ejemplo, en la Refinería de Esmeraldas, donde el proceso de repotenciación pasó de aproximadamente de 200 millones a 2.200 millones, con una serie de irregularidades que han sido denunciadas. Lo que resulta un atentado contra un país como el nuestro, necesitado de recursos para su desarrollo.
Un tema de relevancia económico-social es el tema de la reconstrucción de Manabí, por el terremoto. Allí se recogieron dineros de la gente, de la cooperación internacional, del Estado; y existen indicios de presunto mal uso de los recursos que se destinan a obras que la gente no necesita o que no son prioritarias, dejando de lado las necesidades reales y demandas de la gente. Cuando vinieron los integrantes de la Comisión Nacional Anticorrupción de Manabí a entregar sus denuncias al Pleno del CPCCS-T dijeron, por ejemplo, que se están construyendo canchas de fútbol mientras todavía hay gente que no tiene casa.
En el caso de la Refinería del Pacífico, estamos hablando no solamente de una inversión de 1.500 millones que no tiene un resultado efectivo, sino que representa un proyecto con gran impacto social negativo; hay comunas que fueron expropiadas, a las que aún no se les paga y a quienes no se les socializó adecuadamente el proyecto, obteniendo un “visto bueno” que ahora algunos de ellos rechazan al sentir que fueron manipulados. Pero lo más grave realmente es que hablamos de un verdadero pecado ambiental, porque para poner allí la Refinería, el Gobierno anterior redujo el área protegida y luego mataron el bosque, las especies. En una provincia como Manabí que no tiene agua, el canchón de la Refinería fue la mayor contribución para incrementar el proceso de desertificación de esa zona, donde están importantes fuentes de agua y el bosque nublado.
¿Cuál será el papel del CPCCS-T si en la mayoría de estos casos ya existen denuncias que se han hecho públicas, e incluso investigaciones avanzadas o ya judicializadas?
Justamente, antes encontramos que un mecanismo de impunidad fue dejar los casos quietos, no moverlos, hacerse de la vista ciega, y se quedaban allí durmiendo. Por eso, más que una investigación tradicional, vamos a investigar en qué situación se encuentran los casos para adoptar acciones contra la impunidad. Esto implica primero identificar en qué etapa se encuentra cada proceso, completarlo si es necesario, o ubicar en dónde y porqué se quedó paralizado, y empezar a mover aquellos que descansan tras el velo de la impunidad, en busca de resultados. Porque eso es lo que demanda ciudadanía.
En varios de los casos priorizados tenemos avances en el sentido señalado, en otros estamos constituyendo los equipos de trabajo. Además, hacemos un esfuerzo enorme por procesar las denuncias recibidas, tanto las recientes como las de períodos anteriores, tenemos muchísima información que analizar, valorar y procesar.
Con todo, la idea que queremos dejar clara es que en este corto tiempo que tenemos, no alcanzaremos a resolver todos los temas de corrupción, ni a investigar todos los casos para que se muevan. Nuestro objetivo es mostrar que se puede trabajar de manera diferente, desde la ética y desde la eficiencia en el ámbito público. Queremos hablar con actos que permitan que las ciudadanas y los ciudadanos vean que es posible recuperar la confianza en una institucionalidad del Estado, si esta es proba.
