Para la mayoría de los políticos que han logrado administrar los diferentes entes seccionales, sean Juntas Parroquiales, Municipios (incluye a los concejales) o Prefectura, también los que se han beneficiado al ser partícipes de una burocracia, probablemente hablar de provincialización es un triunfo y un beneficio.
Por el contrario para la gran masa ciudadana que apoyó a muchos de estos líderes políticos, la provincialización no los ha sacado de la difícil situación en que se encuentran, esta realidad acaba de ser corroborado por la Secretaría Técnica para la Erradicación de la Pobreza (Setep), entidad adscrita a la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades), donde delinea los objetivos, políticas, y metas que el Ecuador impulsará hasta 2017.
Durante el evento, la Setep presentó importantes cifras sobre la situación en las provincias. Por ejemplo, en pobreza por ingresos, las provincias con mayor impacto de esta pobreza en el área urbana son Esmeraldas (37,8%), Santa Elena (33,0%) y Santo Domingo (30,9%).
Santa Elena registra la más alta tasa de desempleo en su población del 8,9%. Después se ubican Esmeraldas (6,9%) y Guayas (6,5%).
Con estos indicadores, las autoridades de elección popular poco han avanzado para erradicar la pobreza en la provincia de Santa Elena. Es vergonzoso celebrar un año más de provincialización con estos indicadores de pobreza, es decir nuestras autoridades, debido a su incapacidad, ignorancia o egoísmo, han ocultado la verdad, a ese pueblo que esperó más de ellos en estos 7 años.
Muchos de estos líderes de elección popular que han desfilado en estos últimos 20 años, y específicamente en los últimos 7 años, poco han hecho para cambiar la cara de esta provincia, porque han mostrado un deseo de concretarse sólo en el presupuesto de las entidades que asumen, más no en amalgamar y activar la productividad local.
La ciudadanía observa una exagerada lisonja a ciertas autoridades de elección popular, que incluye a ciertos comunicadores que también son responsables al agrandarlos por nimiedades, eso ha ocasionado que muchos de ellos, en lo limitado que son, se mareen y crean que son unos visionarios, los índices recientemente publicados demuestran que no lo son.
Lo preocupante es que sólo 11 personajes han manejado las administraciones municipales y prefecturas en los último 20 años.
Por Santa Elena: Jimmy Candell Soto, Otto Vera y Dionicio Gonzabay
Por La Libertad Patricio Cisneros, Marco Chango y Antonio Espinoza.
Por Salinas: Nelly Guerrero, Vinicio Yagual, Paúl Borbor y Daniel Cisneros.
Por Prefectura: Anita Triviño y Patricio Cisneros.
La repuesta a esta realidad ¿será que necesitamos, una nueva generación de políticos?
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