Con el trasfondo de la actual pandemia, que afecta de manera desproporcionada a los medios de subsistencia de los artistas y profesionales de la cultura en todo el mundo, la 15ª reunión del Comité Intergubernamental de la UNESCO para la Protección y Promoción de la Diversidad de las Expresiones Culturales, celebrada esta semana, aprobó una financiación de más de 730.000 dólares para proyectos culturales.
La financiación, procedente del Fondo Internacional para la Diversidad Cultural (FIDC), beneficiará a 9 proyectos de Bolivia, Chile, Colombia, Guinea, Indonesia, Nigeria, Palestina, Seychelles y Timor-Leste, de un total de 615 propuestas presentadas. Con ello, el apoyo total del FIDC asciende a más de 9,4 millones de dólares, lo que supone la financiación de 129 proyectos en 65 Estados Miembros desde 2010.
La decisión del Comité está en consonancia con la política de la UNESCO de apoyo al sector creativo y cultural, que se ha visto afectado por la pandemia, como se muestra en el informe Re|Pensar las Políticas para la Creatividad, recién publicado.
Este periodo de profunda agitación nos plantea a todos una elección. O bien intentamos limitarnos a parchear los agujeros, lo que sin duda nos llevará a enfrentarnos a los mismos retos en un futuro próximo, o bien aprovechamos la oportunidad de transformar el ecosistema cultural de forma integrada para hacerlo más resistente, más inclusivo y más sostenible.
La COVID-19 puso de relieve los retos a los que se enfrentan los artistas y los trabajadores de la cultura para acceder a un trabajo decente, especialmente en países con una infraestructura social limitada o inexistente. La ayuda de la UNESCO se dirige a jóvenes, mujeres y grupos vulnerables de los países en desarrollo, con el fin de proporcionarles un entorno laboral más estable.
Los proyectos seleccionados son:
Establecimiento de una alianza impulsada por la comunidad para la planificación del desarrollo cultural sostenible en Lautem, Timor-Leste, dirigida por la ONG Many Hands International-MHI.
Fomento de la diversidad cultural a través del empoderamiento de los jóvenes en Chile, dirigido por Arte Joven (Corporación Cultural Balmaceda Doce Quince).
Reforzar y restablecer la cultura en el centro del desarrollo económico y social de Seychelles, dirigido por el Instituto Nacional de Cultura, Patrimonio y Artes de Seychelles.
SOMOS DIVERSOS: Empoderamiento de las profesionales del sector audiovisual de grupos vulnerables en siete países de América Latina, dirigido por la Federación Iberoamericana de Cinematografía, Colombia.
Promover y supervisar la libertad artística en Indonesia, dirigido por la Perhimpunan Koalisi Seni Indonesia - Asociación de la Coalición de Arte de Indonesia, Indonesia.
Mejorar el acceso al mercado de los artistas con discapacidades, dirigido por Potter's Gallery Initiative, Nigeria.
Promoción de las industrias culturales y creativas en la ciudad de La Paz, Bolivia, dirigida por la Fundación Visión Cultural, Bolivia.
Ramallah City of Music - una estrategia para el desarrollo sostenible de la ciudad a través de la música dirigida por el Ayuntamiento de Ramallah, Palestina.
Refuerzo del espíritu empresarial en los sectores audiovisual, de la moda y del diseño en Guinea, dirigido por La MUSE, Guinea.
El FIDC capacita a los actores de la sociedad civil y a los sectores públicos que están detrás de estos proyectos para impulsar un crecimiento económico creativo sólido y sostenible. Gracias al refuerzo de la recaudación de fondos, la UNESCO espera duplicar las contribuciones al Fondo en los próximos tres años para poder apoyar más proyectos. El FIDC forma parte de la Convención de la UNESCO sobre la Protección y Promoción de la Diversidad de las Expresiones Culturales (2005), que cuenta con 151 Partes.
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