LEONARDO RIVADENEIRA
Una provincia
que pretende vivir del turismo no logra siquiera consolidar los sitios emblemáticos,
la suerte para los que viven de aquello, es que el visitante llega por la
facilidad de las vías a los sitios costeros en poco tiempo, va de Salinas hasta
la Entrada en una hora o un poco más si va haciendo escala para comer.
Sin embargo,
las zonas rurales alejadas de las playas, que también tienen sus virtudes no son
muy difundidas complicando los ingresos económicos para un gran sector de
comuneros.
Esta forma
de vivir en la provincia con pocos ingresos en la mayoría de los habitantes no
cambia, porque precisamente los burgomaestres andan más preocupados por
supuestamente hacer vías y calles para contentar a un pueblo desempleado (de 245.000
habitantes en edad de producir, 100 mil habitantes no trabajan) por eso se ve un
interés desmedido casi a nivel de fanátismo porque su alcalde triunfe, no
importa que el alcalde tenga un record y antecedentes de juicios y actos que
riñen con la moral, esos fanáticos no ven, son ciegos, su mente está
predispuesta para que le den un trabajo o contratos para subsistir,
Con estos
resultados ahora la responsabilidad recae en el equipo 61, ojalá ese equipo no
sea solo membrete y al poco tiempo nos demos cuenta que son iguales o más
incapaces que los anteriores
Aunque el
peninsular por lo regular da la imagen de ser un hombre calmado no tan
ambicioso, los políticos no mantienen esa personalidad una vez que llegan al cargo
cambian, se marean, sacan personalidades importadas, los que estamos
relacionados con la comunicación lo hemos constatado más de una década. ojalá los ganadores recuerden que han sido elegidos por una escasa votación y nada más
Cuando están
el cargo andan preocupados más por su imagen, cuando lo que deben hacer es
actuar en beneficio de los ciudadanos.
Es incomprensible
que un pueblo milenario no haya mantenido esa trayectoria de progreso de
nuestra raza ancestral, ahora somos mestizos con grandes defectos, con ambición
desmedida por el dinero.
Si no se
inicia una nueva forma de reeducar a los niños en las que se destaque su
ancestralidad, el cuidado de las playas, el control de los desechos, la falta
de árboles, la descontaminación ambiental estaremos condenados a seguir como
una de las provincias más atrasadas del país.
Ahora con el
avance tecnológico será más fácil darnos cuentas de cómo y en qué invierten los
alcaldes y prefecto, la ciudadanía espera que no gasten miles de dólares para
mostrar que han construido una calle y nada más.
Basta de
construir canchas, primero construyan el conocimiento de los niños y jóvenes
para erradicar la tendencia a la drogadición, qué futuro nos deparará las nuevas
generaciones con ese consumismo que mata e idiotiza
