El día viernes 18 de mayo de 2018, el Estado ecuatoriano fue notificado
por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con su decisión de dar fin
al proceso de solicitud de medidas cautelares, a favor del señor Gustavo Massuh
Isaías, en el caso Odebrecht, quien fue condenado por el delito de asociación
ilícita y es procesado por el delito de lavado de activos.
En el proceso de medidas cautelares, el solicitante alegó padecer una
condición médica que podría agravarse al cumplir su pena privativa de libertad
en un centro de rehabilitación social, en ese contexto, el 24 de noviembre de
2017, solicitó a la CIDH la adopción de medidas cautelares a su favor, a fin de
cumplir la pena en un centro psiquiátrico.
El Estado ecuatoriano, a través de la Dirección Nacional de Derechos
Humanos de la Procuraduría General del Estado controvirtió la posición del
solicitante y remitió a la CIDH documentación suficiente para demostrar que la
condición médica del señor Massuh ha sido monitoreada y controlada
constantemente por el ente rector en materia de rehabilitación social, el
Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, en coordinación con el
Ministerio de Salud Pública, logrando que durante todo el tiempo de privación
de libertad el solicitante se encuentre estable.
La información aportada evidenció la ausencia de los requisitos de
gravedad, urgencia y daño irreparable, necesarios para el otorgamiento de
medidas cautelares.
Con estos antecedentes, el 17 de mayo de 2018, la Comisión “teniendo en
cuenta la información remitida a la CIDH por ambas partes”, decidió cerrar el
expediente correspondiente a la solicitud de medidas cautelares, con lo que el
solicitante, de conformidad con la sentencia interna, deberá seguir cumpliendo
su pena privativa de libertad, en un centro de rehabilitación social.
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