No nos referimos a la campaña
actual sobre la consulta popular, sino a la que se viene para captar las dignidades
seccionales, sean estas prefecturas, alcaldías, juntas parroquiales, concejalías
entre otras.
Ya estamos observando en las
redes sociales y en ciertos medios de comunicación de la provincia de Santa
Elena a donde acuden los políticos, la fuerza, la consigna, y las pretensiones que
tienen algunos líderes por captar ciudadanos a su tienda política.
Y va con virulencia, como que
presienten que es ahora o nunca, para seguir administrando la cosa pública, en
eso ellos han sido consuetudinarios, es decir, ha sido habitual en los políticos
nuestros.
Los políticos están haciendo su
trabajo, que son bien remunerados cuando alcanzan dicha dignidad, ganan un sueldo
elevado comparado con el promedio de ingreso de los santaelenenses, que son
insignificantes, producto, precisamente de la falta de visión de los que hoy
están tratando de convencer a los electores, ya que sus programas, sus obras no
han rendido lo que la sociedad esperaba, el crecimiento de fuentes de empleo es
casi nulo.
La mayoría de los que están en la
cosa pública han equivocado su misión, creen que solo obras son cartas de
presentación, esa es una de las tantas metas que deben cumplir esos dignatarios
para lograr mantener una sociedad con las comodidades básicas, situación que no
ha dado resultado hasta este 2018 en la provincia de Santa Elena.
En todo sitio donde haya pobreza,
ignorancia, limitación económica, los políticos tienen su caldo de cultivo y
salen airosos, por eso probablemente no desean que esto cambie.
Es inverosímil que habiéndose invertido
más de 3000 millones de dólares en la provincia de Santa Elena en los últimos
10 años, estemos con apariencia de poblados del siglo XX, eso es vergonzoso, ante
esa realidad los políticos nuestros, muchos de ellos no preparados, incultos,
limitados, egoístas hasta con sus propios simpatizantes, no alcanzan a
comprender que han vegetado en algunos casos en la administración municipal.
No existe o por lo menos nunca han
dado a conocer proyectos en las entidades seccionales para el desarrollo de las
ciudades, todo es al andar, yo consulto, yo investigo y construyo, el futuro
para los políticos solo es el presente, de eso se nutren, así las poblaciones
salen perdiendo.
Es positivo que haya voces nuevas
que quieran inmiscuirse en la política, pero, no deben olvidar que la única
forma que el pueblo los distinga, es dando muestra de su honorabilidad, su
prestancia, su educación, su capacidad intelectual, y su firmeza para no
desistir cuando las cosas se ponen difíciles, ésas son las premisas básicas
para un candidato con visión de lo que hay que hacer por la provincia de Santa
Elena, de lo contrario veremos las mismas escenas en cada elección, con
resultados alarmantes donde algunos oportunistas, medios “avispados” en el
poder sacaron ventaja a través del sentimentalismo propio de nuestra idiosincrasia.