El año 2017 es el año de las elecciones y las decisiones, el
pueblo o los ciudadanos decidirán si quieren seguir con un gobierno como el
actual o desean una administración diferente.
En 10 años han cambiado las formas de administrar el país, el
ciudadano común a pesar de las constantes cadenas del gobierno no entiende el
beneficio
Hacen pensar que solo los integrantes del gobierno son impolutos
y lo privado no. Hay entidades de control hasta para tomar agua, a pesar que
hay leyes en la constitución que ya lo controlan todo.
Se observa hasta en la justicia, donde antes de tomar una
decisión el juez ya es suspendido, es decir el aparato gubernamental esta en
todo, por eso la ciudadanía cree que no hay imparcialidad, ni independencia en
el órgano judicial, legislativo, ni en las autoridades de control.
Quizás fue un error, haberle dado tanto poder al actual
gobierno que se sintieron omnipotentes, merecidos, embruteció a muchos y optaron como epílogo
corromperse al máximo nivel.
Hoy la ciudadanía observa que para mantener ese ritmo de
gasto en el país, se necesita prestar y prestar dinero hasta el último día en
funciones, de lo contrario se notaría la recesión, y afectaría a las
pretensiones de los candidatos gobiernistas.
Con un precio del petróleo en dudas, la única forma de
mantener ese ritmo de gasto, es seguir prestando y cómo vamos a pagar sin
productividad, la solución, más impuestos, supuestamente para los más ricos,
horrenda mentira.
Acá en Santa Elena, ya están cuenteando al pueblo que los
candidatos gobiernistas van a conseguir el financiamiento para una planta de
agua potable en la zona norte, con qué plata, sino hay. Cuando la hubo ninguna
autoridad seccional tuvo la valentía para presionar y solicitar que se instale
una nueva planta para los santaelenenses.
Cuando se construyó la planta de gas licuado en Monteverde, a
ninguno de nuestros representantes, se les ocurrió, que como compensación por
el riesgoso uso del suelo, instale una planta de agua potable para dar vida a
los comunidades del norte.
Mientras la pobreza y las interrogantes se incrementan, el
ciudadano, duda entre seguir con el
gobierno actual o aceptar uno diferente.