Se comenta con certeza que otra opción de ingreso económico para el peninsular aparte de la agricultura es el turismo. Sin embargo, poco se hace para que esta otra opción, se inserte en la rutina productiva de la provincia.
En está área hasta las autoridades de elección popular nos quedan debiendo. El gobierno tiene estrategias a mediano y largo plazo. Es hora de que prefectura y alcaldías arrimen el hombro con más interés, deben pensar que si no hacen algo y pronto por el turismo, la pobreza en la provincia de Santa Elena se incrementará aunque las estadísticas minimicen esta realidad.
Creemos que las entidades seccionales deben incorporar a personas con experiencia en la rama turística, además estas entidades deben nutrirse de personas preparadas en la cultura, la arqueología, el arte, la gastronomía, la arquitectura, la antropología, etc. Porque el turismo no es sólo mar y playas. Los extranjeros aman la naturaleza, el entorno, la construcción vernácula, también se interesa en lo que crean nuestros artistas y artesanos.
Hay que crear zonas especiales para el desarrollo turístico, donde las entidades municipales ofrezcan áreas que goce de infraestructura básica, ¿cuándo ocurrirá eso? No lo sabemos.
Esa limitación de nuestras autoridades de elección popular tiene limitada a nuestra sociedad productiva, que posee habilidades variadas, pero adolece de ingresos.
Mientras nuestras autoridades no quieran reconocer sus limitaciones y que no cuentan con personal especializado en las áreas anteriormente mencionadas, poco es el avance que se obtenga, lo más preocupante es que en las provincias vecinas, si se están interesando por estos detalles.
No esperemos que la situación en el área turística se vuelva crítica para, recién darnos cuenta que necesitamos de especialistas, además no hay que descuidar que el entorno debe mejorar en sus estética, nuestras ciudades muestran un descuido que preocupa. Follow @laprimeraec
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