Los
habitantes de la calle 18 de agosto entre Manabí y Virgilio Drouet exactamente
a 2 cuadros del edificio de la municipalidad de Santa Elena al mando de María
del Carmen Aquino, se quejan porque han enviado oficio a la alcaldesa reclamando
por la intención de dar permisos a informales para que se instalen ocupando las
calles del sector todo el mes de agosto con el pretexto de la fiesta patronal.
Han ido a
la alcaldía un grupo numeroso de habitantes del barrio Manabí, pero les han
contestado que la alcaldesa solo recibe al pueblo los días lunes previa cita,
llega el lunes y con cualquier pretexto se posterga la cita, ante ello los
moradores se vieron en la necesidad de hablar con José Domínguez, director
administrativo de la municipalidad de Santa Elena, quien les ha dado largas en
el asunto, sin solucionar su pedido.
DomÍnguez ha respondido que hay que darle chance a esta gente, así los moradores creen que una de estas madrugadas se instalan estos informales y se quedan bajo la protección de la entidad municipal.
El reclamo
de los habitantes del sector es porque esta invasión momentánea de informales
obstaculiza el tráfico vehicular, lanzan cables eléctricos para utilizar la
acometida de la calle, no cuentan con batería sanitarías, dejan un basurero las
calles una vez que termina la fiesta patronal. Hicieron notar que esa decisión
de suspender la toma de las calles no se dará porque hay un mandamás ahí que da
las ordenes que no pueden decir el nombre por temor.
Es
lamentable que los alcaldes cada que hay fiestas de cualquier tipo practiquen
el hábito de dar permisos municipales a todo informal que viene
transitoriamente al cantón Santa Elena, generando ellos mismos el desorden en
pleno centro de la ciudad.
Una fiesta
patronal cuestionada por la forma de organizarla, desdibuja la pobre imagen que
tiene la capital de la provincia de Santa Elena, la alcaldesa manifestó
inclusive que habrá fiesta para estas fechas, ya que el contrato de las fiestas
de enero que no debió realizarlo, lo suspendió en parte. Ahora seguirá con ese
proceso para darle distracción al pueblo con un gasto onerosos de miles de
dólares.
La capital Santa
Elena muestra una imagen deplorable, no hay planificación, así sin rumbo,
seguiremos con esa fachada tercermundista que al ciudadano le avergüenza,
parece que a la burgomaestre la llena de felicidad