LEONARDO RIVADENEIRA
Todos los meses la ministra Brown se interesa porque los
profesores y alumnos asistan a los establecimientos educativos con una rigidez
casi nazi, no importa que educadores y estudiantes estén contagiados, esto ha
generado las debidas protestas de profesores enfermos, padres de familia
contagiados que temen que sus niños, muchos no se han vacunado, también se
contagien de las variantes del COVID 19
La ministra Brown habla de la UNESCO como que fuera su
patrón, quizás porque quiere tapar la inoperancia de la enseñanza a distancia,
que no ha surtido efecto en los alumnos, unos porque no tienen computadores,
otros porque no le llega la señal o no tienen dinero para contratar el servicio
de Internet
Ha fracasado ella en lo que respecta al aprendizaje, los
alumnos no dan muestra de interesarse en este tipo de enseñanza por una serie
de vicios que arrastran desde hace décadas, cree que con la asistencia en
físico se puede minimizar esa falencia.
Ese pensamiento se justifica, por lo contrario, si solo el
interés es por deshacerse de las colaciones escolares, por ello la insistencia
que asistan los profesores a cumplir con esa tarea, entregar las colaciones
escolares.
Lo vergonzoso es el poco interés de los padres por retirar
estas colaciones, se estima que el 10% de los alumnos reciben esas colaciones al resto del
alumnado no le interesa, así que el proceso es recibir esas colaciones y los
rectores indican a los profesores que entreguen los mismos, en mayor cantidad
de lo usual porque colaciones sobran en grandes cantidades.
Ese sainete de entregar colaciones y que los alumnos no lo
reciban, debe conocerlo la ministra Brow, sin embargo, no creo que ella haya bajado las compras de estos productos
Un despilfarro de recurso económico a sabiendas que hace 2
años los alumnos no retiran el 90 % de las colaciones alimenticias conformada
por 18 líquidos y 14 sólidos lo que cubriría la alimentación de 18 días para el
estudiante. Cuántos millones se desperdician, eso es un secreto bien guardado
por todos los ministros de educación que han pasado en los últimos años.
Al no asistir en Guayaquil a los establecimientos profesores ni alumnos por decisión de Cinthia Viteri, alcaldesa de la ciudad, el plan de entregar las colaciones fracasa, pero seguramente ese desperdicio ante esta realidad critica, será cancelado al proveedor porque el excesivo pedido de colaciones no es culpa de ellos, sino del que ordena la compra.
Ecuador un país
donde los funcionarios públicos actúan sin pensar que sus decisiones afectan la
economía local.
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