El delantero uruguayo mordió a Branislav Ivanovic en el biceps derecho durante el segundo tiempo del partido de Liga que enfrentaba, en Anfield Road, a Liverpool contra Chelsea y que terminó empatado 2-2.
La conducta de Suárez recibió además la condena de su técnico, Brendan Rodgers, quien resaltó que la acción fue "inaceptable" y subrayó que "no hay jugador o entrenador más grande que el Liverpool".
Asimismo, la Asociación de Jugadores Profesionales del Reino Unido le ofreció al Liverpool y a Suárez su asesoramiento para que el goleador aprenda a controlar su ira.
El uruguayo, que no fue sancionado durante el partido ya que el árbitro no vio la acción, deberá esperar ahora la reacción de la Federación inglesa, que podría investigar el incidente y sancionarlo. Follow @laprimeraec