LEONARDO RIVADENEIRA
Hace 11 años escribí sobre los problemas acuciantes que ya
mantenía la provincia de Santa Elena, que eran la falta de agua y
alcantarillado, el desorden con crecieron las ciudades, lo peor un quemeimportismo
por el medio ambiente, así como lograr la meta de arborizar y embellecer las
ciudades.
Más de una década y todo sigue igual, ante estas falencias
de las ciudades ¿cómo se puede lograr un crecimiento social y turístico?, vergonzosamente
los únicos que crecieron en lo social y económico fueron las ex autoridades.
Las urbes de Salinas, La Libertad y Santa Elena son tres ciudades
feas en su mayor parte, extensos sectores parecen suburbios empobrecidos de
otras ciudades grandes y nada más. Esa es la realidad actual después de 12 años
de manejarnos independientemente.
No estoy cuestionando la provincialización eso iba porque
iba, increpo la incapacidad de los alcaldes, timoratos, nada visionarios,
embrutecidos por usar los pocos fondos que tienen gastándolo en cosas improductivas.
Si se hiciera un inventario de los millones de dólares que
han gastado en espacios deportivos nuestros políticos, probablemente hace años
se hubiera construido otra planta de agua potable.
En12 años de provincia estamos como el inicio, nuestro único
patrimonio es la naturaleza: la playa y el mar. Para el turista que da dinero a
nuestros habitantes, poco se hace, no hay baterías sanitarias, no hay otros
lugares de distracción, ninguna ciudad posee un museo de arte y ya somos
372.000 habitantes.
En síntesis: felices los 4 pelagatos que han hecho fortuna a
costa del fondo público, infelices la mayoría de ciudadanos que aún duermen
pensando en que van a comer mañana.
Lo que es peor con la incapacidad de la mayoría de los
alcaldes que apuntan a los impuestos prediales como su salvación la juventud no
tiene futuro.
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